Diseño de la formación

Capacidad para diseñar la formación combinando partes teóricas y prácticas

Una de las cosas más importantes que hay que tener claras a la hora de ser tutor en la empresa es el itinerario formativo que se va a seguir.

En este sentido, el tutor en la empresa tiene que ser capaz de crear e impartir un programa de formación que se ajuste a los requisitos del aprendizaje y fomente la aplicación de los conocimientos teóricos en un entorno práctico como es la empresa.

Para ello, el tutor en la empresa deberá desarrollar el programa de formación para el aprendiz, de acuerdo con los requisitos de la empresa, pero también teniendo en cuenta que se centra en el proceso de trabajo de la empresa. Esto significa que el plan tiene que ser realmente útil para el aprendiz a la hora de trabajar en la empresa concreta, y no sólo una idea general de lo que es «trabajar». El plan debe hacer coincidir las acciones específicas que el aprendiz realizará como parte del aprendizaje con los conocimientos específicos que haya podido adquirir previamente. Un buen ejemplo es, por ejemplo, incluir en el diseño de la formación contenidos relacionados con la exportación. Si la empresa en la que va a trabajar el aprendiz es una empresa de frutas, impartir una formación centrada en la exportación de objetos y no de alimentos no será útil.

Como se ha dicho, la formación debe combinar siempre la teoría y la práctica, asegurándose de que se basan la una en la otra; la mayoría de las veces, el aprendiz no será capaz de hacer un ejercicio práctico sin aprender primero la teoría, pero hasta que no haya realizado la actividad práctica, la teoría no se entenderá del todo.

También es relevante a la hora de diseñar la formación tener en cuenta la necesidad de colaborar con la organización de envío. Esto facilitará la comprensión de los contenidos académicos que el alumno ha recibido previamente, evitando posibles repeticiones o lagunas entre los conocimientos actuales del alumno y las expectativas del tutor (Cámara de Comercio, Industria y Servicios Zaragoza, 2015)

Ejercicio: planificando la formación

En el siguiente ejercicio, puedes ver un ejemplo de un plan de formación para nuestro ejemplo de empresa, FOODCOM. Obsérvalo y evalúa si, según tu opinión, hay una combinación correcta de aprendizaje y práctica. (Generalitat Valenciana, N/D)

Una vez hayas evaluado el ejemplo del plan de formación, puedes discutir con el grupo para ver si todos llegaron a las mismas conclusiones.

¿Qué partes del plan cambiarías? ¿Crees que falta algo en el plan de formación?

Tema a debatir

Aparte de debatir los resultados del ejercicio anterior, otro tema interesantes podrían ser los siguientes:

¿Es realmente necesario proporcionar una formación combinada de práctica y teoría?

Capacidad para elegir el contenido y la metodología pertinentes

Siguiendo con el programa de formación a desarrollar, otra cuestión importante a realizar por el tutor de la empresa es la metodología de formación que se va a seguir. (Cámara de Comercio, Industria y Servicios Zaragoza, 2015)

Una metodología interesante a seguir es el llamado «Método de los cuatro pasos». Se basa en cuatro acciones:

1. PREPARAR

El primer paso consiste en prepararse. Debes reunir información sobre el aprendiz, para conocer su experiencia y conocimientos previos, y establecer qué habilidades ya posee. Gracias a esta preparación, evitará hacer «trabajo inútil», ya que no repetirá partes de la formación con las que el aprendiz ya está familiarizado, y no proporcionará una formación imposible de entender porque el aprendiz no tiene los conocimientos necesarios.

Por supuesto, cuando se habla de preparación también se incluye el lugar de trabajo. Debes tener un espacio preparado para el aprendiz, asegurándote de que todos los materiales que puedan ser necesarios estén disponibles. Otra forma interesante de prepararse como tutor en la empresa es dividir el programa de formación en pequeños y sencillos pasos, y poner a prueba dichos pasos, para asegurarse de que son comprensibles.

2. DEMOSTRAR

El segundo paso de la metodología consiste en demostrar al aprendiz la actividad completa. Con esto queremos decir que es importante mostrar al aprendiz, en tiempo real, cuál es la actividad exacta que va a realizar, pasando por todos los pasos incluidos en ella, tal y como lo haría cualquier profesional.  Con esto, estás demostrando al aprendiz lo que se espera que acabe siendo capaz de hacer, y además le estás dando una clase práctica para que tenga una guía a la hora de hacerlo.

Esta demostración debe hacerse en dos fases: primero, haciendo todo el proceso como cualquier funcionario, pasando por los pasos uno tras otro, para que el aprendiz pueda ver la cosa como un todo. Y después, dividiendo el proceso en pequeños pasos, mostrando al aprendiz cómo se hacen, explicando por qué se hace así y respondiendo a cualquier posible pregunta. Esto es especialmente relevante si hay alguna actividad en la que la seguridad laboral es importante.

3. IMITAR

En el tercer paso, imitar, el aprendiz realizará la actividad que se le ha mostrado en el paso anterior. El formador debe estar al lado del aprendiz, supervisando la actividad pero sin hacer ningún comentario, e interviniendo sólo si es absolutamente necesario (por ejemplo, si el aprendiz no sabe cómo continuar, o si cree que su seguridad puede estar en peligro). Sin embargo, cuando se intervenga, es importante limitarse a dar instrucciones al aprendiz y dejar que sea él quien las lleve a cabo, en lugar de asumirlas. Además, no debes reprender al aprendiz, ¡recuerda que está aprendiendo!

Cuando el aprendiz esté «imitando» el trabajo realizado en este paso de la metodología, también es muy útil hacerle explicar lo que está haciendo. De este modo, te asegurarás de que está entendiendo el proceso y no se limita a copiar algo que ha visto, lo que a su vez asegurará que sea capaz de hacerlo bien en el futuro. Si los comentarios o las explicaciones no te parecen suficientes, puedes pedir al alumno que profundice en ello, pero sólo si es necesario.

Una vez que el aprendiz haya terminado, debes explicarle qué cosas podría haber hecho de mejor manera, o de forma diferente. Y por último, el aprendiz volverá a repetir el proceso, sin detenerse y sin comentar, como haría cualquier otro funcionario. De todos modos, cuando llegues a esta última parte del tercer paso, recuerda que lo más probable es que el aprendiz no haga un trabajo perfecto, o lo suficientemente rápido. Al fin y al cabo, está aprendiendo.

4. PRACTICAR

El último paso, practicar, consiste en hacerse a un lado y dejar que el aprendiz pruebe por sí mismo. Si hace el trabajo solo, se sentirá «presionado» a hacerlo por sí mismo, y así aumentará su seguridad e independencia en el trabajo. Debes estar disponible para que el aprendiz te pregunte y resuelva dudas, pero no directamente a su lado.

Aun así, no estar al lado del aprendiz no significa no supervisar el trabajo realizado.  Debes asegurarte de que el trabajo se hace correctamente, corrigiendo al aprendiz si es necesario, y tratando de evitar errores. De todos modos, como se ha dicho anteriormente, no reprenda al aprendiz, ¡sus comentarios deben ser siempre constructivos!

Para finalizar la metodología, asegúrate de hablar con el aprendiz y analizar el trabajo que ha realizado, preguntándole si cree que ha aprendido todo lo necesario, y si cree que hay algo que debería haberse explicado mejor o de forma diferente.

De todos modos, seleccionar una metodología que sea relevante para tus necesidades significa que quizá no todo funcione bien en todas las situaciones. Si esta metodología te funciona, ¡fantástico! Pero si no es así, no dude en buscar métodos alternativos que garanticen que el alumno está aprendiendo el contenido adecuado que se requiere, y obteniendo la práctica esperada.

Ejercicio: completar la metodología

Ahora que hemos pasado por la Teoría de la metodología de cuatro pasos, podemos intentar probarla y ¡ver cómo funciona en la vida real! En el siguiente ejercicio, debes completar la plantilla de la metodología con información que sería útil en tu caso personal.

Solo por si acaso, hemos establecido algunos ejemplos que se fundamentan en nuestro ejemplo FOODCOM de unidades anteriores a este módulo. Una vez haya terminado, puedes debatir con el resto del grupo la forma en que cada uno ha completado los pasos de la metodología; puede que te aporten algunas ideas que también ¡podrían funcionar para tu empresa!

Tema a debatir

Aparte de debatir los resultados del ejercicio anterior, otros temas interesantes a debatir podrían ser los siguientes:

¿Cree que la Metodología de los cuatro pasos es útil para todos los casos de prácticas? ¿Qué haría diferente? ¿Eliminaría o añadiría alguno de los pasos?

Capacidad para diseñar un programa de formación basado en las necesidades de aprendizaje de los aprendices

Cuando hablamos de programas WBL o de programas de aprendizaje, una de las principales cosas que hay que tener en cuenta es que siempre se centran en asegurar que el aprendiz recibe una formación coherente con sus estudios y su futura carrera profesional. Es decir, suelen estar centrados en las necesidades de aprendizaje del aprendiz y en las necesidades profesionales de la empresa. Por lo general, cuando se lleva a cabo un programa de aprendizaje, el tutor de la empresa estará en estrecho contacto con el tutor académico para asegurarse de que el aprendiz que va a participar se aplica efectivamente al papel requerido, pero también para garantizar que la teoría y la práctica aprendidas estarán conectadas y serán recíprocas.

Sin embargo, una vez que el aprendiz está claro, la relación con el tutor académico está clara, y el contenido está claro, como tutor en la empresa tienes que recordar una cosa: cada persona es un mundo. Esto significa que no todos aprenden de la misma manera, y muy probablemente el aprendiz que tienes a tu lado en el año 1 no tendrá nada que ver con el aprendiz del año 2. Teniendo esto en cuenta, el programa creado para un aprendizaje debe ser siempre personalizado para los aprendices, asegurándose de que tiene en cuenta diferentes aspectos:

• Los conocimientos reales del aprendiz: siempre hay que tener en cuenta los conocimientos teóricos y prácticos que ya posee el aprendiz, de lo contrario, como se ha mencionado en las partes anteriores de este módulo, se puede acabar dando información repetida.
• Evite los conocimientos genéricos: los conocimientos genéricos suelen ser conocimientos conocidos. Esto significa que algunos aprendices ya conocerán esas cosas genéricas que usted piensa incluir en el programa. Si no son obligatorias o esenciales, evítalas.
• Asegúrate de comprobar realmente lo que hace el aprendiz en el centro académico: así te darás cuenta de en qué áreas no necesitas profundizar y en cuáles sí.
• En cualquier caso, al final todo se reduce a una cosa: asegurarse de que el programa que se imparte está personalizado para los aprendices, evitando proporcionar conocimientos genéricos que algunos aprendices ya pueden tener. Algunas formas interesantes de hacerlo son, por ejemplo, el uso de pruebas específicas para evaluar los conocimientos reales del aprendiz, o la creación de un escenario de caso en el que el aprendiz tenga que pasar por todos los pasos de un trabajo específico de la empresa.

Ejercicio: buscar fallos en el programa

El siguiente ejercicio muestra diferentes casos de planes de formación con alumnos en prácticas realizados en empresas. Para cada uno de ellos, puedes debatir con el grupo si crees que han tenido en cuenta las necesidades del aprendiz y qué cosas podrían haberse mejorado.

Tema a debatir

Aparte de debatir los resultados del ejercicio anterior, otro tema interesante a debatir podría ser el siguiente:

¿Los programas elaborados por los tutores en empresa deben estar fundamentados en las necesidades de los aprendices o únicamente en las necesidades de las empresas?